¡Que se le cae la Corona!, ¡Que se le cae la Corona! Esta podría ser la expresión de las personas que contemplan la procesión de una Virgen de nuestra subvencionada Semana Santa de Palma del Río cuando los costaleros levantan, con ímpetu, su paso. Pero como no estamos en Semana Santa, no me estoy refiriendo a esa Corona, sino a la que consagra el Título II de nuestra maltrecha Constitución de 1978.
Que mal lo tienen que estar pasando cuando de golpe y porrazo van, y en plena crisis, se recortan su salario en un 7,1%. El Rey cobrará 20.910 euros brutos menos y el príncipe 10.455. Según fuentes de la Casa del Rey, el jefe del Estado también ha recortado en un 7,1 por ciento la cantidad anual asignada para gastos de representación del resto de miembros de la Familia Real, que se verá reducida por tanto en 22.365 euros. Los altos cargos de Zarzuela experimentarán la misma rebaja.
Dice el aforismo latino: “Excusatio non petita, accusatio manifesta”, es decir, excusa no requerida, acusación manifiesta: el que alega una excusa sin que nadie se la pida, se acusa a sí mismo, quien se excusa, se acusa.
Nadie le ha pedido a S.M. que haga este recorte, ni que pida perdón por comer del erario público sin ser funcionario, Él está donde está por derecho de sangre y por imposición de don Francisco, es más, el Gobierno del Partido Popular cuya cabeza visible es Rajoy, no le ha recortado ni a la Corona, ni a la Iglesia, ni a los defraudadores… entonces ¿A qué responde este auto-recorte?
Pues a que no saben cómo sostener la corona sobre la testa. Tiene una hija mayor divorciada, con lo Católicos, Apostólicos y Romanos que son esa familia; tiene otra hija casada pero que no se entera de nada de lo que sucede a su alrededor sobre todo con todo lo relacionado con el séptimo Mandamiento de la Santa Madre Iglesia y para colmo ahora la nuera, cuando ya parecen haberse apagado los ecos de su polémica cacería en Botsuana y ha conseguido mantener el caso Urdangarín en la distancia, salta la noticia de la imputación de familiares directos de la princesa.
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Cangas de Onís ha citado a declarar como imputada por un delito de alzamiento de bienes a Menchu Álvarez del Valle, abuela de La Princesa de Asturias, que tendrá que comparecer el viernes, día 20 de julio, a las 10:15 horas, en dicho Juzgado. En la misma causa están imputados Jesús y Henar Ortiz Álvarez, padre y tía respectivamente de Letizia Ortiz. Lo que le faltaba al Rey.
En cuanto al Príncipe, se le nota otro tono menos subidito que el que empleó con esta chica:
Y es que como apuntaba en el “Contrato Social” Juan Jacobo Rousseau: “No hay que pensar en que un rey proporcione a sus súbditos la subsistencia, puesto que es él quien saca de ellos la suya”. ¿Hasta cuándo pueblo?
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