Terminábamos el último
post señalando otro sabio refrán castellano: “No hay dos sin tres”, este aforismo toma el número cabalístico "tres"
para reflejar la constante relación entre la cifra y los hechos del hombre. Es
como estar esperando la invariable llegada de la tercera vez, esto quiere decir
que, cuando algo pasa dos veces, volverá a pasar una tercera vez y así ha
sucedido en nuestro caso.
Aquí tenéis otra de
esas dudas que me surgen y que no entiendo:
Es un hecho
demostrado que la cofradías penitenciales surgen en el siglo XVI, inspiradas por
el Concilio de Trento, con el fin de realizar una catequesis pública donde se
enseñaba a un pueblo inculto, los misterios de la Pasión y Muerte del Señor; lo
de la resurrección vino mucho después. En este sentido, en el Estatuto Marco Diocesano
de Hermandades y Cofradías de Córdoba en su artículo 4-1-b) podemos leer: “El
día..., de todos los años, hará la Hermandad Estación Penitencial acompañando a
las Imágenes de sus Titulares. Este desfile procesional, realizado dentro de un
clima de orden, silencio y sentido penitencial, debe ser testimonio de
auténtico significado de la Pasión, Muerte y Resurrección del Señor. La
procesión, se realizará de acuerdo con un horario que no impida a los cofrades
o fieles la participación en los Santos Oficios de Semana Santa, que son las
celebraciones litúrgicas fundamentales de los misterios pascuales. Durante el
recorrido procesional, los cofrades observarán la compostura y recogimiento que
corresponde a este acto y se esforzarán en reflexionar sobre el amor de Cristo
a los hombres manifestado de una manera especial en estas celebraciones. Antes
de la procesión los cofrades participarán en la Eucaristía o al menos en una celebración
de la palabra”.
Este día de la
procesión, tan importante para los cofrades, los podemos ver cómo van rezando
por la calle, por ejemplo el Lunes Santo en Palma del Río, pero claro el
evangelista San Mateo en el capítulo 6, versículos 5-8 dice lo siguiente: “Y
cuando oréis, no seáis como los hipócritas, que gustan de orar en las sinagogas
y en las esquinas de las plazas bien plantados para ser vistos de los hombres;
en verdad os digo que ya reciben su paga. Tú, en cambio, cuando vayas a orar, entra
en tu aposento y, después de cerrar la puerta, ora a tu Padre, que está allí,
en lo secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará. Y al orar, no
charléis mucho, como los gentiles, que se figuran que por su palabrería van a
ser escuchados. No seáis como ellos, porque vuestro Padre sabe lo que necesitáis
antes de pedírselo”.
Con estos datos, he
aquí mi pregunta retórica, ¿Alguien me podría explicar para qué sirven estas
Estaciones de Penitencia si no están cumpliendo lo que dicen los evangelios? ¿Hay
algún Católico Apostólico y Romano que se haya leído la Biblia?
Sólo me resta
desearos, sin acrimonia alguna, una Feliz Pascua Florida.
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