jueves, 17 de abril de 2014

LA SEMANA SANTA y UNA PREGUNTA RETÓRICA. SEGUNDA PARTE.

Dice el proverbio español que “nunca segundas partes fueron buenas”. Esta es una sentencia que pronuncia el Bachiller Sansón Carrasco cuando habla con Sancho sobre la novela en que aparecen: "algunos dicen: 'Nunca segundas partes fueron buenas'» (El Quijote II 4). En la actualidad, se emplea bastante para aludir al fracaso de la segunda parte de una película y también se emplea en obras literarias y en toda obra artística.

Yo espero que esta segunda parte de "la Semana Santa y una pregunta retórica" no defraude a mis lectores y le quite al proverbio la razón.

Aquí tenéis una de esas dudas que me surgen y que no entiendo:
En Hechos de los Apóstoles, Hechos de los Apóstoles es el nombre de un libro de la Biblia, el quinto del Nuevo Testamento concretamente, aclaro esto para que haya dudas sobre qué libro he leído; en el capítulo 17, versículos  24-25 se dice: ”El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que hay en él, ese, siendo Señor del cielo y de la tierra, no habita en templos hechos por mano del hombre, ni por manos humanas es servido, como si necesitase de algo…”
Con estos datos, he aquí mi pregunta retórica, ¿Alguien me podría explicar para qué están construyendo una nueva Iglesia en Palma del Río? Y  si os habéis fijado… ¿Cómo van a sacar los cofrades sus pasos de esa nueva Iglesia si la puerta es estrecha y poco alta? ¿Cómo puede un humano servir a Dios si no lo necesita por ser Dios? ¿Hay algún Católico Apostólico y Romano que se haya leído la Biblia?
Anda, hay otro refrán castellano que dice: “No hay dos sin tres”…

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